¿Cuándo se considera que una empresa está en quiebra técnica?

¿Cuándo se considera que una empresa está en quiebra técnica?

La pandemia de Covid-19 ha traído consigo graves consecuencias tanto para la salud, como para la economía y ha dejado a su paso un gran cumulo de empresas en quiebra. Según los datos de un informe publicado por el Banco de España, el 25 % de las compañías españolas se encuentra en situación de quiebra técnica. Además, el Banco de España prevé que el número de empresas en quiebra aumente si esta situación se prolonga, lo que podría provocar que esa cifra alcanzara el 30 %.

Vamos a detallar y definir claramente, en primer lugar, qué situaciones se tienen que dar para que una empresa se considere en quiebra técnica. 

La quiebra técnica se puede definir como una situación que tiene lugar cuando una empresa incumple con una o más obligaciones financieras, pero no se declara en quiebra de manera oficial, es decir, que no se ha acogido al concurso de acreedores o al pre-concurso. En este sentido, asimismo, podemos afirmar que una compañía está en quiebra técnica cuando su activo es inferior a su pasivo exigible y, en poco tiempo, no dispondrá́ de fondos suficientes para hacer frente a sus pagos. 

En trabajos anteriores, donde intentábamos conocer e interpretar la información que proyectaba nuestra empresa a través de su balance de situación y cuenta de resultados, podíamos comprobar cómo, a nivel de balance de situación, su estructura principal de masas patrimoniales era la siguiente: 

  • l  ACTIVO. 
  • l  Activo No Corriente. Activos fijos que permanecen en la empresa más de un 
  • año
  • l  Activo Corriente. Activos circulantes que están en la empresa un año como máximo. De tres tipos principalmente: 

Existencias. Deudores y clientes. Efectivo y Tesorería. 

l PATRIMONIO NETO Y PASIVO. 

Fondos propios. Fondos aportados por los socios y generados por la propia empresa: 

l Capital. 

l Reservas.Resultados. 

² Pasivo No Corriente. Deudas y compromisos de pago con vencimiento superior al año. 

²Pasivo Corriente. Deudas y compromisos de pago con vencimiento de hasta un año. 

Tal y como hemos mencionado, la quiebra técnica supone imposibilidad de la empresa para hacer frente a sus compromisos de pago, utilizando para ello sus activos. Esto implica que la suma del total de activos (corrientes y no corrientes) es inferior a la suma del total de deudas (corrientes y no corrientes). 

Siguiendo con el mismo razonamiento, cuando el total de activos (corrientes y no corrientes) es inferior al total de pasivos (corrientes y no corrientes), supone una situación en la que el patrimonio neto es negativo. 

Evidentemente, no es una situación a la que se llegue de un año para otro, en circunstancias normales. Quiere esto decir que se habrán dado unos determinados condicionantes, para que nuestra empresa se encuentre en dicha situación. 

Es importante advertir que, la Ley de Sociedades de Capital (L.S.C.) establece como causa obligada de disolución de toda sociedad de capital las pérdidas que dejen reducido el patrimonio neto a una cantidad inferior a la mitad del capital social, a no ser que éste se aumente o se reduzca en la medida suficiente, y siempre que no sea procedente solicitar la declaración de concurso. Obligación, por otro lado, que pocas empresas cumplen. 

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